¿Quien es?

Santi Molezún, nacido el 28 de julio de 1970 a las 13:14 del mediodía en la mística tierra de Santiago de Compostela, Galicia, fue el último brote de una familia de seis hijos. Desde que sus pies apenas rozaban el suelo, ya se veía atraído por lo esotérico y lo invisible; una pasión que florecía, espontánea e indomable, en su corazón joven. Para él, la brujería, el espiritismo y la videncia no eran conceptos lejanos, sino una extensión natural de su propio ser.

Con solo 11 años, después de las únicas campanadas de libertad que le permitían la salida del colegio, se escondía en su habitación, lejos del escrutinio de sus padres, para recibir a esas almas inquietas que buscaban respuestas. Les atendía con la sencillez de quien no conoce otra verdad: sin zapatos, descalzo como un monje despojado de vanidades, sentado en su almohada con las piernas cruzadas, como un pequeño buda gallego.

Los clientes, señoras y señores que intuían en él un don especial, se acomodaban con reverencia a los pies de su cama, que no era más que un bastión de inocencia, una cápsula de intimidad infantil donde se desplegaban los secretos del universo. Sobre el edredón de esa cama de metro y medio, Santi extendía los naipes como si se tratase de un campo donde germinaban visiones del porvenir. Y sin más artificios que la verdad desnuda de sus palabras, revelaba aquello que los consultantes necesitaban oír.

No había publicidad, ni anuncios rimbombantes que prometieran milagros; la magia de Santi era tan pura y desprovista de artificio como su propia edad. Los vecinos y visitantes llegaban porque habían escuchado, de boca en boca, que un niño tenía la capacidad de mirar más allá de lo evidente, de entrever el tapiz oculto del destino. Al concluir cada sesión, como si las palabras hubieran tenido peso físico y hubieran aliviado las cargas de los presentes, estos le ofrecían, con gratitud y admiración, la voluntad, una moneda o un billete que Santi recibía con la misma alegría con la que luego corría a comprar cromos, aquellos tesoros mundanos que para él eran tan valiosos como el don que poseía.

En pocos años, la figura de Santi Molezún comenzó a destacarse en su comunidad. Aún siendo un chiquillo, ya había ganado el título del "brujo más joven de España". La gente hablaba de su certeza, de la forma serena con la que describía situaciones imposibles de conocer para alguien de su edad, y de cómo apuntaba maneras que prefiguraban su destino. Mientras otros niños coleccionaban experiencias sencillas de la vida, él coleccionaba historias, visiones y esos cromos que, aunque intrascendentes para cualquiera, para Santi eran su lazo con la inocencia que nunca quiso soltar del todo.

Actualmente, con ya 43 años de experiencia ayudando a miles de personas de todo el mundo, Santi Molezún se ha destacado por ofrecer claridad y orientación en momentos cruciales de la vida. Reconocido como el mejor vidente del mundo, posee una habilidad única para conectar con el plano espiritual, brindando respuestas precisas y profundas a las inquietudes de sus clientes. Toda su juventud, Santi fue conocido como el "brujo más joven de España", con más de 50 reportajes en prestigiosas revistas y periódicos nacionales como El País, ABC y La Voz de Galicia, ocupando incluso páginas centrales y contraportadas de gran relevancia. Todo esto se puede ver en las hemerotecas, lo cual lo hace aún mucho más creíble.

Esta cobertura mediática, inusual para un adivino y centrada en elogiar sus habilidades, lo catapultó hacia la radio, donde participó en programas de Antena 3, Radio Galega, y La Ser, entre otros. Finalmente, su carisma lo llevó a la televisión, donde tras numerosas entrevistas, se consolidó como uno de los videntes más queridos y reconocidos del país, llegando incluso a presentar sus propios programas en cadenas como La Sexta, Cuatro y FDF, entre muchas otras.

Con la llegada de Internet, Santi alcanzó una nueva audiencia global. Sus vídeos se hicieron virales y su presencia en redes sociales creció exponencialmente. A través de transmisiones en vivo y atendiendo a la audiencia, su popularidad aumentó, alcanzando los 420.000 seguidores, una comunidad que continúa en pleno crecimiento. Sólo en su canal de TikTok ya tiene 227.000 seguidores y 1.5 millones de likes en sus más de 1200 vídeos.

El enfoque de Santi Molezún se cimienta sobre tres pilares fundamentales: la confianza, el respeto y una dedicación inquebrantable hacia quienes recurren a él. Cada consulta se convierte en un espacio íntimo y seguro donde la verdad se despliega sin artificios, donde las inquietudes encuentran claridad y donde la conexión con lo espiritual se hace tangible. Con una trayectoria de más de cuatro décadas, Santi ofrece un abanico de servicios que se adaptan a las necesidades y capacidades de cada persona, siempre con el objetivo de proporcionar guía, alivio y transformación.

Los servicios que brinda abarcan desde las tradicionales lecturas de tarot hasta la videncia con bola de cristal, pasando por trabajos de magia y brujería completamente personalizados, magia mental y otras mancias. Cada servicio ha sido diseñado para ayudar a quienes lo consultan a superar los desafíos que enfrentan, atraer energías positivas y alcanzar el bienestar tanto emocional como espiritual. Nada en su trabajo es genérico: cada intervención es hecha a medida, con la intención de resonar profundamente en el alma de cada cliente y darle las herramientas para enfrentarse al mundo con mayor seguridad.

Santi Molezún cree con firmeza que cada persona tiene en sus manos el poder de transformar su vida. Él actúa como un guía, un catalizador de ese cambio. Sus cartas son como un GPS espiritual que orienta a quienes acuden a él, mostrándoles las opciones y los caminos, pero nunca imponiendo decisiones. Ya sea de manera presencial, telefónica o a través de videollamadas en Zoom, cada consulta es un viaje en el que Santi acompaña, ilumina y apoya. Sus clientes saben que en él encontrarán un aliado, alguien que no juzga, que escucha y que siempre responde con honestidad, incluso si lo que tiene que decir no es lo que esperan escuchar.

Existen, sin embargo, dos temas sobre los que Santi ha establecido límites claros: la muerte y la salud. "Yo no soy doctor, no puedo dar diagnósticos médicos, no estudié medicina y no soy ningún intrusista", afirma con claridad. Esta sinceridad y transparencia le han valido el respeto de sus clientes, quienes aprecian que no intente sobrepasar los límites de su práctica ni falsear sus capacidades. Santi prefiere centrarse en lo que sabe hacer mejor: guiar a las personas en los aspectos emocionales y espirituales de sus vidas, ayudándoles a encontrar la paz y la dirección que necesitan.

Uno de los desafíos más complejos de la videncia, y que Santi afronta con humildad, es el factor tiempo. "No puedo ver el tiempo de manera exacta", explica. En sus cartas, el pasado, el presente y el futuro aparecen a menudo entrelazados, como si fueran hilos de una misma madeja, lo cual hace que ordenarlos cronológicamente sea un reto. Aunque cada carta tiene un valor temporal, esto no siempre basta para saber si el evento que observa corresponde al pasado, al presente o al futuro. Sus visiones pueden abarcar décadas, y algunos eventos que ha visto se han extendido hasta 30 años en el pasado o en el futuro. "Aunque tengo algunas pistas que podrían ayudarme a estimar el momento exacto, prefiero no arriesgarme a dar fechas incorrectas. Por eso, generalmente, me guardo esas impresiones", concluye. Esta actitud refleja no solo su compromiso con la precisión, sino también su respeto por la confianza que sus clientes depositan en él.

Con Santi Molezún, cada consulta es una oportunidad para conectar con lo invisible, para despejar las dudas y hallar un sentido en medio del caos. Su enfoque genuino, sin adornos innecesarios ni promesas vacías, convierte cada encuentro en una experiencia transformadora. Él no solo predice; también inspira, motiva y, sobre todo, acompaña en el camino de la vida a quienes deciden confiar en él.

Santi Molezún ha estado presente en los medios de comunicación desde 1982, consolidando su reputación como uno de los videntes más influyentes y ganándose la confianza de miles de seguidores. Su participación en shows emblemáticos, como el reality "El Castillo de las Mentes Prodigiosas" de Antena 3 TV, lo ha posicionado en el ojo público, donde ha sabido mantenerse sin perder su autenticidad.

Se presenta siempre tal como es: sin fingimientos ni artificios. No busca la aprobación fácil ni se acomoda a los estándares de lo que otros esperan; su sinceridad, aunque a veces incómoda, ha resonado con una audiencia leal que aprecia su autenticidad. Este mismo carácter ha atraído también detractores, pues su enfoque, alejado de las complacencias, no siempre encaja con quienes buscan consuelo sin verdad. Sin embargo, es precisamente esta transparencia lo que le ha permitido destacar en un ámbito donde la honestidad no siempre es la moneda corriente.

Comprometido con brindar una experiencia profundamente personalizada y absolutamente confidencial, Santi se dedica a ofrecer la claridad que cada persona necesita para caminar con seguridad hacia su destino. Cada consulta es un acto de conexión, en el que el vidente entrega lo mejor de sí para despejar las sombras que dificultan el camino de quienes lo consultan.

Con una precisión que ha sido alabada por muchos, Santi Molezún se ha convertido en una figura fundamental dentro del mundo de la videncia. Su capacidad de conectar con el plano espiritual y proporcionar respuestas auténticas ha atraído a todo tipo de personas, desde actores, cantantes y presentadores de televisión hasta políticos, escritores y empresarios. Estas figuras influyentes buscan en él la misma honestidad y claridad que encuentran todos sus clientes, independientemente de su fama o fortuna. Aunque ha sido objeto de atención mediática en múltiples ocasiones, Santi protege con rigor la identidad de sus clientes más importantes, manteniendo siempre un estricto código de confidencialidad que le ha valido aún más respeto.

Cuando se le pregunta sobre sus clientes famosos, Santi responde con la misma honestidad que caracteriza todas sus consultas: "Quien pasa por mi consulta es alguien que cree en mí, sin importar quién sea, el dinero que tenga, o el ego que lo acompañe. Procuro que se despojen de las apariencias frente a mí, ya que, de lo contrario, no podré ayudarlos. No voy a revelar quiénes vienen, pero puedo decir que para mí es igual de importante atender a una persona en paro o humilde que a una figura de renombre en cualquier sector, porque, al final, ambos son humanos, ambos sufren, ambos dudan".

Santi Molezún no solo ofrece predicciones; él ofrece un encuentro profundo con la verdad, guiando a sus clientes a través de sus desafíos con una franqueza que rara vez se encuentra. Es esta capacidad de conectar con lo esencial y su compromiso genuino lo que lo convierte en uno de los videntes más valorados y respetados del sector. Su misión es clara: ayudar a cada persona que cruza su puerta a encontrar su propio camino, con la seguridad de que no están solos y de que, pase lo que pase, siempre tendrán la oportunidad de transformar su destino.

El trato cercano y directo es el verdadero secreto del éxito. Aunque ha alcanzado una gran notoriedad, nunca ha dejado de lado a quienes más lo necesitan, demostrando una educación emocional y una empatía extraordinaria. Su sencillez y humildad lo han llevado a atender gratuitamente a miles de personas de todo el mundo, siempre ofreciendo su ayuda desinteresada cuando más se necesitaba. Esto lo convierte en un vidente muy especial.

Actualmente, desde su despacho en Santiago de Compostela, atiende todos los días, incluidos sábados y domingos, bajo previa cita, ofreciendo su apoyo sin importar la hora o el día, para quien requiera de su guía y orientación.

Lo único que te hará falta es seguir las baldosas amarillas que te llevarán al gran Mago de Oz, la sinceridad y las ganas de mejorar te acompañarán, consigue que él sea la guía de tu vida y te recuerde quien eres.

Testimonios

Recuerda que Santi Molezún tiene un amplio equipo de expertos videntes y profesionales de la brujería, a los que podrás pedir asesoría en cualquier momento del día, de forma presencial o telefónica. 24/7 preparados para atenderte y guiarte, en el caso de que Santi estuviese ocupado, fuera de Santiago de Compostela o con otro cliente. Nuestro equipo está formado por expertos en tarot, mancias, rituales y sobre todo clarividencia extrema.